miércoles, 11 de agosto de 2010

“Date la oportunidad”

“Date la oportunidad, conoce a alguien” ¿por qué las amigas nos dan esos consejos? Es decir, al parecer piensan que el hecho de conocer a alguien depende de la simple decisión algo así como “date la oportunidad prueba el helado de frambuesa” ¿No piensan acaso que si fuera cuestión de mera voluntad ya hubiera conocido a alguien?

Incluso la frase “Date la oportunidad” No puedo dármela, la oportunidad debe de llegar sola aunque muchos libros de liderazgo y autoayuda me contradigan con esas frases idiotas de “NO ESPERES QUE OCURRA, HAZ QUE OCURRA” ¿Qué se supone que pretenden dando ese consejo? Si, realmente, quisiera darme esa oportunidad ¿Cómo me la daría? Suponiendo, por un momento, que esta frase sea la solución inmediata para todos mis problemas amorosos. Primero, buscaría a un hombre, cualquier hombre (porque estoy tomando la oportunidad, entonces, ya no tengo derecho a ponerme exquisita) luego, me acercaría y le diría algo como “Hola he decidió darme la oportunidad ¿estás interesado?” Lo peor de todo es que las amigas que te dan estos consejos son tan o más solteras que tú lo cual te confunde más y te das ganas de preguntarles ¿y tú por qué no te das la oportunidad?

Creo que entre mujeres hemos creado frases esperanzadoras para darnos apoyo unas a otras pero ¿de verdad las creemos o queremos creerlas? Una de mis favoritas, y si hiciéramos un ranking aparecería en las TOP 5 de las frases de consuelo amoroso, es la genialísima “el amor no se busca, aparece cuando menos lo esperas” ¡qué gran mentira! Este consejo, usualmente, lo dan las que están felizmente emparejadas pero seguro si alguien les hubiera dado esta frase como palmada en la espalda en medio de su solitaria existencia, entonces, no les hubiera causado la mas mínima gracia tal parece que “la vaca no se acuerda cuando fue soltera”.

Hace poco quejándome de mis infortunios amorosos con un amigo, este logro sorprenderme y, sin darse cuenta, me dio la versión masculina de las frases piadosas “TENGO MIL AMIGOS QUE ME PREGUNTAN POR TI”. Solo atine a ignorar el comentario y cambiar de tema, seamos realistas ¿si existen mil amigos, entonces por que jamás se me ha acercado ni uno? ¿Dónde están estos mil amigos? Y la pregunta más angustiante ¿son estos amigos imaginarios?

lunes, 9 de agosto de 2010

¿Y una chica tan linda como tú por qué está tan soltera?

¿Qué diablos pasa con el sentido común? A menudo las señoras me cogen de los cachetes y me preguntan ¿Tan linda y soltera? ¿Qué respuesta esperan? Luego de un incomodo silencio y una mirada fulminante prosiguen con la frase “Pero seguro no tienes novio porque no quieres”. Para mis adentros confieso que también me hago la misma pregunta ¿Tan linda y soltera? (y tan ególatra)

Luego de un tiempo sin estar en una relación desarrollas un terror al compromiso. Te conviertes en una solterona por elección. Aunque una amiga suele decir que si eres feíta, gordita y soltera eres soltera por causalidad, pero si eres guapa y soltera, entonces, eres realmente soltera por elección. Quisiera pensar que estoy en el segundo grupo, lo cierto es que luego de salir de una relación larga te acostumbras a tener a alguien a tu lado y llegas a desarrollar la idea de que sola no se puede y que la verdadera felicidad será encontrada cuando llegue la pareja indicada.

Pensemos por un momento en “la sirenita”, “blanca nieves”, “la cenicienta” o “la dama y el vagabundo”. Desde muy temprana edad nos han programado para esperar al maldito príncipe azul. Si Walt Disney siguiera vivo, entonces, enfrentaría serias demandas por daños y perjuicios de un montón de mujeres gritando enardecidas y con pancartas que dirían “WALT, EMBAUCADOR ¿DONDE ESTA MI FINAL FELIZ?”

Vivimos tiempos donde los hombres se han vuelto más dramáticos que las mujeres. La igualdad de género los ha degenerado y muchas hemos renunciado a nuestro conocido drama por la practicidad.Conozco mas mujeres que se aferran a su solteria que hombres, es mas, algunos muchachos son monogamos en serie, son casi un nuevo hallazgo.La verdad aun no se como definirlos pero, al parecer, adoran tener enamorada y no conciben su vida sin una mujer al lado. Mucho cuidado con esos que antes de terminar una relación ya tienen otra bajo la manga en caso de emergencia ¿qué acaso no recibieron suficiente atención de sus madres en la infancia? En mi caso, espero no ser el único, la soltería me ha traído una felicidad constante, existen sus recaídas (especialmente en invierno) o en las odiosas fechas de san Valentín que me dedico a insultar a las felices parejas que sólo saben atrasar las colas de los supermercados, reventar el aforo en lugares públicos y de esparcimiento, sin contar las largas colas en los cines y el despilfarro en miles de arreglos florales habiendo tantos niños que mueren de hambre en África. Bueno ¿hablaba de felicidad constante? Si es cierto, no existen responsabilidades para con otro ser que no sea mi gato, no tengo que reportarme ni aguantar el numerito de “No he sabido de ti en todo el día”, no existen celos y, sobre todo, puedo salir a donde me plazca con quien y quienes me dé la gana. Soy consciente de que, en algún momento, y en pro de la reproducción de la raza humana, eventualmente, tendré que renunciar a mi libertad pero será porque yo quiera.

Cuando se presente el “príncipe Azul” o diré “el engaño de Disney” lo sabré y abandonar mi libertad no será un duro sacrificio sino una feliz entrega.Es como si la sociedad te condenara por estar sola y la verdadera felicidad radicara en encontrar a una pareja. Si todo fuera tan fácil como en tiempos antiguos donde mi papá me hubiera cambiado por una docena de vacas y tres bolsas de trigo. Odio ese maldito dicho “A tu hijo cásalo cuando quieras, a tu hija cásala mientras puedas”.

Las señoras entrometidas, en realidad, esperan una respuesta que justifique mi falta de mari-novio o simplemente se solidarizan con mi soledad expresando mediante su pregunta las injusticias de la vida. Probablemente tengan la ilusión de que resumiré todo en una oración cuando preguntan ¿tan linda y soltera? ¿Será que a ellas Disney también les desgracio la vida? Atribuiré sus preguntas a un choque generacional o una falta de tino. Finalmente no puedo evitar preguntar ¿por qué el príncipe tiene que ser de color azul?

sábado, 7 de agosto de 2010

RING RING

¿Esperando esa llamada? Odio cuando los hombres dicen “cualquier cosa te llamo” ¿a que se refieren? ¿Van a llamar o no? Por más que siempre he intentado tomar las cosas de manera deportiva, caigo en la maldita espera de la llamada, en especial, cuando dicen “fácil te llamo para hacer algo”. “Fácil”, detesto esa palabra, creo que si de verdad quieren salir o van a llamar debería de hacerlo no anunciarlo. Es igual de indignante como cuando alguien te quiere contar algo y te dice “mejor no” ¿entonces por qué me dijiste que quería contarme algo en primer lugar?

En esta espera de la llamada o mensaje de texto, procuramos mantener la línea libre para que el maldito no se tope con la llamada en espera y no nos sorprenda con la conocida “llame pero me mando a buzón de voz”. Te desesperas colgándole a todo el mundo y diciéndole a tus amigas “te dejo, te dejo porque FACIL llama”.

Incluso cuando el teléfono no suena ni porque pusiste la alarma estas mirando de manera obsesiva una y otra vez la pantalla como si existiera una conexión telepática con el sujeto para que se anime a marcar tu número telefónico. De pronto, cUando suena el teléfono el corazón te da saltos, las manos se te ponen frías y si el aparato está lejos de ti corres rauda, astuta y velozmente dando un gran salto de tigre para cogerlo y contestar, ves que es un número desconocido y la emoción de carcome; resulta que es número equivocado (suele suceder).

Fallas técnicas, quien no ha pensando en la posibilidad que justo ese día hay alguna avería telefónica y por eso es que las llamadas no entran ¿y si está llamando y no funciona mi teléfono? Le pides a alguien que te timbre y, naturalmente, el servicio es óptimo. Aceptas la realidad peo aún es temprano y en el caso hipotético de que me invite a salir probablemente llame en la tarde porque si llama en la mañana de repente crea que suena muy desesperado ¡patrañas!

Te metes a bañar, rápido porque esperas la gran llamada, y cuando regresas ves en tu buzón de entrada 2 nuevos mensajes de texto. Te emocionas y una vez que los abres dicen “APRENDA INGLES EN SÓLO 3 CORTAS SEMANAS LLAMAR AL NUMERO 46253-342”.
Llegaron las 9 de la noche y haz tirado la toalla pero ahí no acaba todo te metes al Messenger esperando encontrarlo y que te dé una explicación racional. Tratas en el chat del facebook esperando a que la ventanita se abra y sea él contando que le robaron el celular o que todas las tarjetas de recarga del mundo se acabaron. Lo cierto es que le salió otro plan y no está sumido en el mundo cibernético esperando encontrarte.

Aprendí, con los años que cuando un chico te quiere ver, hará lo imposible por verte. Uno de mis pretendientes, siempre con una mano sobre la otra, hacia lo imposible para conseguir dinero para ir a mi casa a verme hasta buscaba algo de sencillo entre los sillones de su casa ( un tanto patético, jamás debió contármelo). Es momento de dejar de esperar y golpear el celular contra las paredes ¿quieres salir? Entonces sal y no te quedes sentada esperando a que él decida llamar o FACIL se anime. Los chicos deben de aprender que una tiene una vida ocupada y llena de planes (al menos crear la ilusión de que es así).

viernes, 6 de agosto de 2010

"Mas me pegas, mas te quiero"

¿Nos gusta que nos traten mal? Será que tenemos cierta fijación por los villanos de las películas. Particularmente debo de admitir que entre Superman y Lex luthor siempre encontré en extremo más atractivo al segundo. Lo que sucede es que los buenos muchachos son tan predecibles y tan asquerosamente correctos, por ejemplo, cumplí un año con Superman y quedó en llevarme volando a Francia pero de pronto escucha un grito de una anciana atrapada en un edificio en llamas ¿Qué hará? No lo piensa dos veces y me cancela por seguir con el maldito deber de salvar a la humanidad ¿Qué no puede dejar de robarle el protagonismo a los bomberos, solo una vez? Por el contrario, Lex así el piloto del jet privado se desmaye y empiece a vomitar sangre lo haría un lado, tomaría el control del avión hasta que lleguemos a Francia y una vez luego de haber aterrizado llamaría a su médico privado (tampoco es un desnaturalizado) e inmediatamente regresaríamos a la celebración del aniversario.
Definitivamente los malos muchachos traen emoción a nuestras vidas. Además, esta ese reto de tratar de domarlos y cuando hacen algo tierno es más valorado que si lo hiciera un bonachón.

Un muchacho me comentaba que las mujeres adoramos vivir el drama y cuando todo está tranquilo en la relación empezamos a aburrirnos y creamos líos más imaginarios que reales. Obviamente, rechace la teoría que me proponía incluso me di por ofendida. Sin embargo, es muy cierto secretamente nos gusta pelear y que nos pidan perdón aunque sea de vez en cuando es como ponerle un poco de ají a la comida, de otra forma, sería insípida.

Son fascinantes las conversaciones que uno puede escuchar en un baño de mujeres y es fascinante , también, como en el ínterin en que sales del baño y te lavas las manos una chica ha contado toda su historia amorosa y tú en solo 2 minutos ya te enteraste el nombre, apellido y razón social del pobre condenado. Ella se quejaba de que era un espíritu libre y estaba cansada de su relación, estaba completamente harta de que él le exija que lo llamara mañana, tarde y noche y se repetía “yo le dije desde un principio que no era de las que llama y él me dijo que estaba bien que es, mas eso era lo que le gustaba de mi”. Es que eso sucede con los chicos lindos y amorosos quieren estar contigo todo el tiempo y siempre, casi siempre, lo hace todo bien. Te crean un sentimiento de culpabilidad por no dar al 100% como ellos y cuando decides terminarlos parece que lo presienten porque justo ese día se aparecen con el ramo de rosas rojas más grandes del mundo y una gran tarjeta donde gritan todo el amor que sienten por ti.

Luego de haber probado mil patanes en tu vida cuando nos cruzamos con un chico muy lindo pareciera que estuviéramos condicionadas al maltrato y nos abrumara tanto amor. Empieza a nacer cierta animadversión hacia él y hacia sus múltiples detalles. Lo peor es cuando todas tus amigas empiezan a tomarle cariño y te ven como una despiadada cada vez que quejas de él y te repiten “pero fulanito es tan bueno y te quiere tanto”. Lo que pasa es que los santos nunca van a ser iconos sexuales y no he conocido ni a una sola mujer; excepto por María Magdalena que por ahí, se confundió con Jesús pero Jesús era guapo así que es fácil de comprender; que se haya enamorado de un santo.

Entre mujeres nos reforzamos la idea del “Dale una oportunidad, es un buen chico y se nota que se muere por ti” pero con eso sólo logran empujarte a una relación de la que no estás segura. Admito que existe una escases de buenos chicos hoy en día pero ¿es suficiente razón para aferrarte al primero que se cruza considerando como único requisito su bondad?

Tiene dinero, termino su carrera y ahora, sigue su pos grado, un tipo habilísimo y encima músico; el sueño de cualquier mujer pero no el mío. Me repiten ¿Cómo vas a dejar pasar a alguien así? Simplemente no estoy dejando pasar ni perdiendo nada que me interese, soy consciente de que es un buen partido para una “caza fortunas” pero, eventualmente, lo dejaría porque no existe esa química y esa pasión. En pocas palabras porque una blusa sea muy Armani no tiene por qué gustarte. Tus amigas y tu madre te dirán “ya quisiera yo conocer a un hombre así”, entonces, adelante porque yo paso.

No quiero más pensar en malo y bueno ¿por qué será que a veces lo que nos gusta es inmoral, ilegal o engorda? yo sólo quiero alguien que logre que me tiemblen las piernas cada vez que lo vea, que me haga decir cosas incorrectas y me ponga nerviosa con solo sentir su voz. No pido mucho, aunque sea alguien cuerdo sin ninguna patología o cicatriz de infancia ¿alguien tiene el número de Lex Luthor?

miércoles, 4 de agosto de 2010

Limpieza Dental

A medida que los años van pasando se va volviendo más difícil conocer a alguien pareciera que ya hemos explotado todos los nichos habidos y por haber, nos volvemos más exigentes y pasados los veinte años ya no buscamos a alguien con quien pasar el rato. Parece que el reloj biológico te susurra “Recuerda que estas en edad reproductiva, busca un macho apto deja de perder el tiempo”.

¿Si conocieras al hombre perfecto en el escenario equivocado? Como si ya no fuera difícil conocer a alguien normal. Conocí al hombre perfecto (al parecer existen unos cuantos), guapo, profesional, exitoso y doctor, el sueño de toda madre para su hija solterona y el galán de cualquier novela mexicana, en el dentista cuando fui a hacerme una limpieza dental. Divise a mi teleobjetivo en la sala de espera fingiendo leer una revista mientras imaginaba cuan atractivos serian mis hijos si me reproducía con ese espécimen jamás antes visto por esos lares. De pronto, escuche mi apellido anunciando que era mi turno y tuve que abandonar mi fantasía a la fuerza. Entre al consultorio y espere pacientemente al doctor Huertas, un anciano inofensivo y completamente asexual ante mis ojos, grande fue mi sorpresa cuando el hombre de mis sueños reproductivos seria quien sacaría el sarro de mis dientes y me hablaría de cepillos interdentales porque mi querido Doctor Huertas se encontraba en algún maldito seminario para mi desgracia. No negare que intente huir de la situación alegando que prefería a mi doctor de confianza, después de todo los dientes son una cosa seria. Finalmente , tuve que ceder, fueron los peores 40 minutos de mi vida con la manguera saca saliva colgando de un lado de mi boca y este hombre maravilloso diciéndome “escupe”, ”enjuaga”, halagando el nivel de saliva que mis glándulas producían. No obstante yo no perdía la esperanza me convencí a mi misma de que el tipo en cuestión era gay, incluso cruce los dedos porque fuera casado (pero no ningún anillo). Es que uno debe de ser realista ¿Cómo pretender siquiera hacer el mínimo coqueteo luego de tal experiencia? ¿Cómo les contaría a mis hijos (ficticios) la historia de cómo conocí a su padre? “Conocí a tu padre una tarde de invierno mientras revisaba mi cavidad bucal" Desde ahí ya la historia está mal y mata cualquier pisca de romanticismo.

Probablemente me declare una discriminadora pero debería de existir una clausula o un requisito en las entrevistas de admisión a las universidades donde si un hombre guapo tiene la vocación de ginecólogo o dentista sea rechazado categóricamente ¿si eres guapo y ginecólogo que te hace pensar que las mujeres dejaran que las revises? Y no, no estoy exagerando ¿A qué hombre le gustaría que una mujer escultural y maravillosa le venga a hablar sobre sus problemas de disfunción eréctil?

martes, 3 de agosto de 2010

"El que la sigue la consigue"

¿Para lograr algo hay que insistir? Nunca he sido una persona persistente, en cuestiones de amor tengo las cosas muy claras. Mi filosofía me ha salvado de triángulos amorosos y andar tratando de convencer a alguien de por qué debe de escogerme me parece la peor estrategia del mundo. No logro comprender a las mujeres que luchan por su hombre y se atreven a meterse en relaciones llamando por teléfono o mandando mensajes de texto citándolo en lugares bajo la excusa de que sólo quiere verlo porque aunque hayan pasado los años y el tenga novia ¿aún somos amigos, no? Cuando me he encontrado con mujeres “luchadoras” en mi camino y han tratado de empezar una competencia de “vale todo” por el hombre en cuestión he optado, sanamente, por hacerme a un lado. Se trata de tener claro que él no es el premio, tú eres el premio y no se hable más. Si él te quiere en serio no lo pensara dos veces y mandara al diablo a “la luchadora” aquella muchacha que busca probar, patéticamente, que es la mejor y más apta para procrear pero sólo tiene graves problemas de autoestima y quizás no haya recibido suficiente atención por parte de su padre cuando era niña.

Dejo claro que no aprecio la perseverancia en las mujeres cuando de conquistar se trata. Crecí con mi papá repitiendo “lo hombres saben para que es una mujer y para qué son otras” o en buen cristiano, los hombres saben que mujeres valen la pena y que mujeres son para pasar el rato. Si eres una mujer que vale entonces no lo dudes y oblígalo a que se vuelva necio, total, si te quiere a ti que le cueste y que la sude. A los chicos parece gustarle el reto y mientras más difícil sea, más interesados están. Si es que se dan por vencidos de arranque significa que no están listos para jugar en las ligas mayores y sólo querían jugarse una pichanga de fin de semana, es decir, querían alguien para pasar el rato y cero compromiso.

“Donde pone el ojo, pone la bala”, llega una edad donde no te vas con medias tintas. Quieres un hombre y no un niño. Uno que sea lo suficientemente macho para atreverse y no andar insinuando que quiere salir contigo o el famoso “llámame si alguna vez quieres hacer algo” ¿de verdad creen que llamare? Tendría que estar desesperada o loca para llamarlo yo. Si él quiere salir conmigo que llame él, total tiene mi número.

Existen los que se atreven y luego a la hora de la verdad entran en ataque de pánico con la sola idea de tener que salir en una cita contigo a solas ¿Qué les pasa? Conocí a un muchacho que insistió para salir conmigo. Fue tanta su insistencia que, francamente, despertó un interés en mi, así, que ni lenta ni perezosa le dije que sí. Llegado el momento decisivo creo que una fuerza divina le reveló que tendría una cita con “el bebé de Rosemary” porque se apareció con su amigo, solo faltaba que se cogieran de la manito para no perderse. Me sentí un poco aturdida pero decidí pensar lo mejor, posiblemente necesitaba un poco de valor y en un rato despacharía al acompañante. Una vez encaminados en la cita y luego de una hora, seguíamos siendo los tres, media hora más tarde y con un aburrimiento extremo mi “valiente” galán empezó a llamar compulsivamente a más chaperones (¿Cómo si con uno no fuera bastante?). Después de que logro conseguir un quórum masculino de “machos apoyando machos porque tememos a las hembras” nos dirigimos a un grifo donde se desarrollo la peor conversación del planeta basada en carros y en toros ¿Qué me sucedió? ¿Por qué diablos no invente que tenía que ir a salvar ballenas en el polo norte? Cualquier cosa para irme de allí. Hay situaciones que te dejan tan anonadada que no sabes cómo reaccionar y me bloquee, totalmente. Creo que entre los hombres se cuentan la leyenda urbana de que si te quedas conversando con una mujer a solas por más de dos minutos te empieza a salir vagina.

De los muchos especímenes con los que he salido uno de mis favoritos es “el cancelador”. Ese chico que adora cancelarte al último momento. Yo comprendería a este si tan sólo existiera una prueba de que yo tuve la iniciativa y lo puse en aprietos con mi insistencia que no le quedo otra opción que aceptar la salida. Pero, nadie los obliga es más insisten y presionan para que a las finales se echen para atrás. Otra cosa son las excusas inventadisimas que insultan mi intelecto, es decir, si van a mentir que lo hagan bien y se tomen el trabajo de elaborar una mentira verosímil. Me cancelo una hora antes de la salida ¿Qué los hombres no saben nada de mujeres? Así no estemos interesadas en el muchacho igual nos tomamos el trabajo de emperifollarnos, en mi caso, peluquería, algo de maquillaje y el asqueroso trabajo de pensar qué diablos ponerme ¿Aún así me plantan? Creo que los hombres deberían saber cuántas molestias se toma una para salir a una cita y no lo tomarían tan a la ligera. Por el contrario, se esforzarían el doble por hacer que pasemos uno de los mejores momentos de nuestras vidas.

Otro tipo de galán de poca monta y creo que el más peligroso es el de las “eternas salidas”. Ese que siempre te invita salir y nunca te dice nada, es más, ya no sabes cómo insinuarte al “eterno pretendiente”. Todo indica que le gustas pero, al mismo tiempo, no da señal alguna de cortejo. Salí durante un año con un “eterno pretendiente” incluso conocí a su familia y lo acompañe a un viaje a su pueblo natal, aguante a su tía solterona y a otra que se puso a llorar mientras se depilaba las cejas con cera y sufría por las infidelidades del esposo, soporte que su primito tire por el wáter mi cepillo de dientes y, por último, compre una obscena cantidad de pan y queso para los parroquianos que estaban al mando de su tío sacerdote ¿todo para qué? Eventualmente dejamos de salir yo estaba harta del “calienta, calienta pero no prende”. Dos meses después me entere que había conseguido una novia, que indignación.

Cada vez que un chico no me hace caso mi mamá me consuela con la teoría de que debe de ser homosexual. La verdad me gustaría aferrarme a esa idea pero luego recuerdo quien lo dice y regreso a la realidad de otro amorío fallido. Creo que en cierto momento llega tu igual y simplemente ambos lo saben y por cosas de la vida, todo simplemente funciona sin forzar nada ¿Cuándo encontraré a mi igual?