miércoles, 25 de agosto de 2010

La emoción de la caza

¿Cuándo lo tienes ya no quieres? Siempre me han gustado las cosas difíciles creo que eso de la psicología inversa funciona de manera perfecta conmigo y por eso debe de ser que me gustan tanto los gatos. Con un gato debes de ser paciente, prácticamente cortejarlos, día tras día ir ganando su confianza de a pocos. Su indiferencia e inaccesibilidad llaman a la necedad. Cuando todo es muy fácil se pierde la atracción, en el caso de los hombres que se te lanzan encima y son extremadamente directos, en ocasiones, espantan porque matan todo el romance y se saltan el cortejo ¿Ya no se valora la expectativa? ¿El dulce sufrimiento que da la incertidumbre en el amor? Muy aparte de eso, siempre me han causado cierta desconfianza los hombres “muy sabidos” esos que parece que se las saben todas con sus frases tan hechas como “Nunca he conocido a una chica como tú” solo inspiran la pregunta ¿a cuántas más les has contado el mismo cuento? Hay hombres tan interesantes, en apariencia, que te dices a ti misma “jamás se fijaría en mi” es justo ese pensamiento el que me incentiva a convencer a este hombre interesantísimo de que soy más interesante que él. En el juego de “dar y quitar” empiezo haciéndome notar con una broma sutil o un sarcasmo que haga relucir lo ingeniosa que soy, llamar su atención pero al mismo tiempo que no se note que lo haces por él, es todo un arte que no deja lugar a patéticos disfuerzos de los que algunas mujeres hace uso y abuso.

Pero qué tal si cuando logras tenerlos ya no los quieres y, ciertamente, no son lo que pensabas que serian. Gran desilusión y fin del juego hay veces que simplemente quieres la emoción de la caza y una vez que tienes a la presa llamándote por teléfono 4 veces al día e invitándote a salir ya no la quieres.

Recuerdo haberlo tenido un par de clases, nunca me atreví a pedirle si quiera la hora o mucho menos empezar una conversación con un ¿Qué dijo el profesor? Era la clase de chico bohemio, despreocupado, de jeans rotos y polo desgastado sacado de una revista de modas vintage. Llego un buen día que este muchacho decidió tomar la iniciativa conmigo, obviamente, yo no salía de mi asombro, es decir, no me consideraba lo suficientemente interesante para recibir la gracia de su conversación. Una salida con él y fue un gran “QUIERO UN DEVOLUCIÓN COMPLETA DE MI DINERO” me sentí totalmente estafada, este muchacho era un embaucador, aburridísimo y sin sentido del humor o del sarcasmo. Un fatuo que sólo hablaba de dos cosas de carros y de él. Hay personas, definitivamente, que son una buena idea en teoría pero en la práctica no funcionan cual lo esperado.

viernes, 20 de agosto de 2010

"Mereces a alguien mejor"

¿Quién diablos habrá sido la persona poco sutil que creo las famosas frases para dejar a alguien? La verdadera pregunta es ¿por qué las personas las siguen creyendo? Buscamos un consuelo y tratamos de engañarnos a nosotras mismas cuando de amor se trata. Intentamos protegernos pero si alguien piensa dejarme que me diga la verdad y que no me engañe con el “No eres tú, soy yo” porque me está diciendo que arranque que soy yo, es ligeramente obvio. Lo que sucede es que al tratar de mostrar misericordia, solo dejas en claro que subestimas la inteligencia del pobre infeliz a quien estas dejando. Siempre intentaremos terminar de la mejor manera una relación, nos rompemos la cabeza buscando las palabras correctas para que la persona no sufra pero no nos damos cuenta que si le pones un lazo rojo a un puñal y lo clavas no haces que sea menos doloroso.

Recuerdo haber apelado a la mentira barata de los problemas psicológicos por el divorcio de mis padres, una táctica muy efectiva y, ciertamente, no me hacía ver como la mala de la película sino como la pobre damisela herida que no podía amar porque desarrollo un miedo al compromiso y tenía problemas con los chicos que era muy buenos con ella. Realmente mi víctima estaba muy enamorado como para poder creerse esa explicación. Tan grande era su negación que prefería creer que yo tendría que internarme porque estaba loca de remate antes que aceptar la verdad, que ya no lo quería.

“Me siento en una caja de fósforos”, eso me dijo un muchacho cuando decidió dejarme. Admito que la frase cargaba mucha sinceridad y me sentí aliviada por un momento, es decir, hay que darle merito, el muchacho fue sincerísimo, sólo había un pequeño detalle ¿se sentía en una caja de fósforos? Pobre imbécil si sólo me veía un día a la semana por tres horas. Debe de existir un respeto al dejar a alguien y no ofender con discursos sacado de una novela rosa. Unos años más tarde la vida me trajo una explicación racional y no me dejo exactamente porque estuviera atrapado en la caja de fósforos sino porque estaba atrapado en un closet recontra rosado del que salió airoso con otro hombre de la mano.

Dejar a alguien es como una obra de teatro dividida por actos. Primer acto, es una antesala donde sueltas la bomba hay algunas que les gusta el anticuado y sangriento “TENEMOS QUE HABLAR” otras, simplemente escogen el “factor sorpresa” citando, estratégicamente, al próximo abandonado en un lugar público, así se evitan escenas poco decorosas y llantos desesperados acompañados con el “DAME OTRA OPORTUNIDAD”; Segundo acto, la conversación porque debe de haber una introducción donde le dices a la persona lo maravillosa que es y que “CUALQUIERA SERIA AFORTUNADA DE ESTAR CONTIGO” o “NO TE MERESCO, ERES DEMASIADO PARA MI” ; tercer acto y el FINAL la despedida con un “YO NO QUIERO HACERTE DAÑO” o “ENCONTRARAS A ALGUIEN QUE TE HAGA FELIZ PORQUE TE LO MERECES”. Advierto que la persona alias “el abandonado” pondrá resistencia y tratara de lanzar manotazos de ahogado con el viejísimo “¿PERO QUE HIZE MAL?”. Lo mejor es ser firme y si no funciona y uno se ve metido en el lio de la vida porque la persona llora como si le hubieran matado a la madre, entonces es momento del famoso engaño de “TOMEMONOS UN TIEMPO” (indefinido), si pregunta por cuánto tiempo simplemente decir que tienes muchas emociones encontradas en ese momento y que ya hablaran.

Debo de advertir que existe cierto tipo de terminada que funge de ultimátum. Te la juegas mas no quieres terminar sólo lo haces para que la persona se asuste y sepa que está en peligro de perderte, a la vez, se dará cuenta que tú no estás para aguantar tonterías y puedes dar por terminada la relación cuando se te antoje total ¿hombres hay por millones no? Pero ¿qué tal si las cosas no salen cual lo planeado y se te quema el pan en la puerta del horno? No hay que subestimar al enemigo ni olvidar que también tienen autoestima y, algunos, odian ser manipulados porque en la mayoría de los casos conocen la jugada. Una amiga segurísima de que este chico moría por ella y no soportaría vivir sin ella lo termino esperando que él le llore cual María Magdalena y pida perdón por sus faltas arrodillado en chapitas de coca cola. En vez de eso él le dijo “Eso es lo que quieres, entonces bien, terminamos”.

Es mucho más fácil terminar con un patán que un chico que quieres como amigo. Con el primero no necesitas un discurso sólo cargar el hígado como granada de guerra y contarle hasta de que se va a morir pero al amigo es difícil dejarlo porque, realmente, no quieres causarle dolor y, en realidad, quieres que sea feliz pero con alguien más. Después de todo algo de cierto tienen estas mentiras piadosas que repetimos una y otra vez para hacer sentir mejor a nuestros ex parejos
“Nadie manda en el corazón” eso es lo que algunos no entienden y piensan que portándose como niño de colegio luchando por lograr el sticker dorado pegado en la frente al final del día es suficiente para mantener a esa persona a su lado. Finalmente, comprendí que de nada sirve retrasar el momento de la verdad y eso de seguir con alguien por pena es negarme a mí la oportunidad de encontrar a alguien que yo ame y quitarle la oportunidad de que él encuentre a alguien que lo ame como se merece.

A veces, mantenemos a alguien para no tener que enfrentar la soledad y muchas veces no duele tanto perderlo sino la costumbre de tener a esa persona al lado, en especial cuando se trata de relaciones largas. Al principio, puede que una mala racha de postulantes te caiga encima, las citas son atroces (en mi casi, la gran mayoría). Soy activista y miembro honorario del pensamiento de la alternativa terrible, de tal manera, esperando lo peor es que decido salir con un muchacho. Bajas expectativas conllevan a cero desilusiones

sábado, 14 de agosto de 2010

La fantasia de la Mosca

¿Nunca fantaseaste con ser una mosca? Entre mis fantasías mas rankeadas tengo, en primer lugar, la de disfrazarme de monja (no es una fantasía sexual) e ir caminando por las calles y que la gente me considere un ser sagrado y digan lisuras bajito y se esfuercen por hablar en dificil porque, total, yo tengo el poder de acusarlos con Dios y que se quemen en el fuego eterno. Mi segunda fantasía, no es menos cuerda pero más emocionante, es convertirme en mosca. Sé que es más normal y común fantasear el día del matrimonio, el funeral (mi favorito) o quizás en el día que venga mi primera cría al mundo. Pero desde que tengo memoria siempre soñé con poder convertirme en una mosca y volar a lugares donde pasara desapercibida. Creo que más que nada mi fantasía parté de un deseo de espía frustrado. Nunca me gusto ese juego adolescente ( que nos sigue hasta viejos) de enterarte que dice o piensa de ti por medio de la amiga “confidente” quien en realidad es la menos discreta y las más boca floja ¿si no le puede guardar un secreto a él que te hace pensar que te guardara un secreto a ti? Las épocas del ¿pregúntale si le gusto? o ¿qué te dijo de mi? Nunca terminan sólo nos hacemos más prudentes, en la mayoría de los casos.

Regreso a mi fantasía, convertirme en una mosca volar hacia su cuarto y poder escuchar todo lo que dice de mi o si habla consigo mismo sobre mí. En mis peores momentos cuando me acecha la maldita pregunta ¿se sentirá igual de triste que yo? Es donde me gustaría convertirme en ese insecto y saber que sucede con él.Lamentablemente, en la realidad lo máximo que podría hacer es instalar micrófonos en su cuarto o cámaras de vigilancia, lo cual es posible pero creo que ilegal y hasta cierto límite obsesivo.

Es increíble la cantidad de horas que pasamos descifrando lo que ellos quieren decir o lo que trataron de decir. Lo cierto es que los hombres son criaturas prácticas y, en la mayoría de los casos, literales. Por el contrario, nosotras somos criaturas complejas que esperan que se anticipen a lo que queremos y si es posible que nos lean la mente. Incluso en las peleas es típico que los ilusos hombres caigan en la trampa de preguntar ¿estás molesta? A lo que, naturalmente, responderemos “No para nada, todo está bien”. NADA ESTA BIEN ¿es mucho pedir que se fijen en el sarcasmo? ¿Es difícil que lean la expresión fácil? No queremos ser complicadas sólo que presten más atención antes de meter la pata, un poco de sentido común o tal vez que sean un poco más minuciosos al hacer su examen de conciencia.

Sólo se pide un poco de intuición y que respeten los rituales, por ejemplo, si al despedirse suelen decir “chau te quiero, besos” y, de pronto, un día dicen “chau, cuídate”. No pueden culparnos por entrar en la alerta roja de preguntarnos ¿por qué ya no dice “te quiero” al despedirse? ¿Será que ya no me quiere? Luego de romperme la cabeza tratando de comprenderlos asimile que cuando un hombre dice “rojo” es “rojo” y no quiere decir violencia ni comunismo, son una raza práctica que no escribe entre líneas ni usa subtítulos. Empecé a comprender que ser directa con ellos es la mejor manera de lidiar con su falta de empatía pero no siempre es fácil porque existen cosas que esperamos que comprendan sin que tengamos que explicarles todo. Se quejan de nuestra falta de comunicación, creo que de lo que se deberían de quejar es de su limitación por no percibir sutilezas. Lo acompañe a una fiesta y no paraba de bailar con su ex, para cuando terminó y me busco yo ya estaba a kilómetros de distancia insultándolo camino a casa y aun así tuvo la poca cara de preguntar ¿Que paso por qué te fuiste así? Me pregunto si de verdad no saben que hicieron una trastada o se hacen los imbéciles.

Francamente creo que a los hombres los entrenan para hacerse los imbéciles posiblemente crean que, en cierto punto, nos apiadaremos y les perdonaremos bajo la premisa “hombre limitado carente de sentido común y bruto por excelencia”. Sin embargo, la táctica masculina de “No me di cuenta” es eficaz, en muchas ocasiones. Pueda que hayan encontrado la fórmula perfecta para “salir limpios de polvo y paja”.

Luego de una pelea me quedaba con las ganas de devolver tres veces tres el mal momento que me había hecho pasar. Después de las milesde peleas aprendes que lo peor que puedes decir es “perdón” porque una vez que acumulas cierta cantidad de “perdones” algo se rompe y empiezas a odiar esa palabra. Es cuando las venganzas silenciosas nacen con un sentimiento revanchista de hacer pasar a la otra persona por el mismo momento doloroso e incomodo al cual te expuso.

miércoles, 11 de agosto de 2010

“Date la oportunidad”

“Date la oportunidad, conoce a alguien” ¿por qué las amigas nos dan esos consejos? Es decir, al parecer piensan que el hecho de conocer a alguien depende de la simple decisión algo así como “date la oportunidad prueba el helado de frambuesa” ¿No piensan acaso que si fuera cuestión de mera voluntad ya hubiera conocido a alguien?

Incluso la frase “Date la oportunidad” No puedo dármela, la oportunidad debe de llegar sola aunque muchos libros de liderazgo y autoayuda me contradigan con esas frases idiotas de “NO ESPERES QUE OCURRA, HAZ QUE OCURRA” ¿Qué se supone que pretenden dando ese consejo? Si, realmente, quisiera darme esa oportunidad ¿Cómo me la daría? Suponiendo, por un momento, que esta frase sea la solución inmediata para todos mis problemas amorosos. Primero, buscaría a un hombre, cualquier hombre (porque estoy tomando la oportunidad, entonces, ya no tengo derecho a ponerme exquisita) luego, me acercaría y le diría algo como “Hola he decidió darme la oportunidad ¿estás interesado?” Lo peor de todo es que las amigas que te dan estos consejos son tan o más solteras que tú lo cual te confunde más y te das ganas de preguntarles ¿y tú por qué no te das la oportunidad?

Creo que entre mujeres hemos creado frases esperanzadoras para darnos apoyo unas a otras pero ¿de verdad las creemos o queremos creerlas? Una de mis favoritas, y si hiciéramos un ranking aparecería en las TOP 5 de las frases de consuelo amoroso, es la genialísima “el amor no se busca, aparece cuando menos lo esperas” ¡qué gran mentira! Este consejo, usualmente, lo dan las que están felizmente emparejadas pero seguro si alguien les hubiera dado esta frase como palmada en la espalda en medio de su solitaria existencia, entonces, no les hubiera causado la mas mínima gracia tal parece que “la vaca no se acuerda cuando fue soltera”.

Hace poco quejándome de mis infortunios amorosos con un amigo, este logro sorprenderme y, sin darse cuenta, me dio la versión masculina de las frases piadosas “TENGO MIL AMIGOS QUE ME PREGUNTAN POR TI”. Solo atine a ignorar el comentario y cambiar de tema, seamos realistas ¿si existen mil amigos, entonces por que jamás se me ha acercado ni uno? ¿Dónde están estos mil amigos? Y la pregunta más angustiante ¿son estos amigos imaginarios?

lunes, 9 de agosto de 2010

¿Y una chica tan linda como tú por qué está tan soltera?

¿Qué diablos pasa con el sentido común? A menudo las señoras me cogen de los cachetes y me preguntan ¿Tan linda y soltera? ¿Qué respuesta esperan? Luego de un incomodo silencio y una mirada fulminante prosiguen con la frase “Pero seguro no tienes novio porque no quieres”. Para mis adentros confieso que también me hago la misma pregunta ¿Tan linda y soltera? (y tan ególatra)

Luego de un tiempo sin estar en una relación desarrollas un terror al compromiso. Te conviertes en una solterona por elección. Aunque una amiga suele decir que si eres feíta, gordita y soltera eres soltera por causalidad, pero si eres guapa y soltera, entonces, eres realmente soltera por elección. Quisiera pensar que estoy en el segundo grupo, lo cierto es que luego de salir de una relación larga te acostumbras a tener a alguien a tu lado y llegas a desarrollar la idea de que sola no se puede y que la verdadera felicidad será encontrada cuando llegue la pareja indicada.

Pensemos por un momento en “la sirenita”, “blanca nieves”, “la cenicienta” o “la dama y el vagabundo”. Desde muy temprana edad nos han programado para esperar al maldito príncipe azul. Si Walt Disney siguiera vivo, entonces, enfrentaría serias demandas por daños y perjuicios de un montón de mujeres gritando enardecidas y con pancartas que dirían “WALT, EMBAUCADOR ¿DONDE ESTA MI FINAL FELIZ?”

Vivimos tiempos donde los hombres se han vuelto más dramáticos que las mujeres. La igualdad de género los ha degenerado y muchas hemos renunciado a nuestro conocido drama por la practicidad.Conozco mas mujeres que se aferran a su solteria que hombres, es mas, algunos muchachos son monogamos en serie, son casi un nuevo hallazgo.La verdad aun no se como definirlos pero, al parecer, adoran tener enamorada y no conciben su vida sin una mujer al lado. Mucho cuidado con esos que antes de terminar una relación ya tienen otra bajo la manga en caso de emergencia ¿qué acaso no recibieron suficiente atención de sus madres en la infancia? En mi caso, espero no ser el único, la soltería me ha traído una felicidad constante, existen sus recaídas (especialmente en invierno) o en las odiosas fechas de san Valentín que me dedico a insultar a las felices parejas que sólo saben atrasar las colas de los supermercados, reventar el aforo en lugares públicos y de esparcimiento, sin contar las largas colas en los cines y el despilfarro en miles de arreglos florales habiendo tantos niños que mueren de hambre en África. Bueno ¿hablaba de felicidad constante? Si es cierto, no existen responsabilidades para con otro ser que no sea mi gato, no tengo que reportarme ni aguantar el numerito de “No he sabido de ti en todo el día”, no existen celos y, sobre todo, puedo salir a donde me plazca con quien y quienes me dé la gana. Soy consciente de que, en algún momento, y en pro de la reproducción de la raza humana, eventualmente, tendré que renunciar a mi libertad pero será porque yo quiera.

Cuando se presente el “príncipe Azul” o diré “el engaño de Disney” lo sabré y abandonar mi libertad no será un duro sacrificio sino una feliz entrega.Es como si la sociedad te condenara por estar sola y la verdadera felicidad radicara en encontrar a una pareja. Si todo fuera tan fácil como en tiempos antiguos donde mi papá me hubiera cambiado por una docena de vacas y tres bolsas de trigo. Odio ese maldito dicho “A tu hijo cásalo cuando quieras, a tu hija cásala mientras puedas”.

Las señoras entrometidas, en realidad, esperan una respuesta que justifique mi falta de mari-novio o simplemente se solidarizan con mi soledad expresando mediante su pregunta las injusticias de la vida. Probablemente tengan la ilusión de que resumiré todo en una oración cuando preguntan ¿tan linda y soltera? ¿Será que a ellas Disney también les desgracio la vida? Atribuiré sus preguntas a un choque generacional o una falta de tino. Finalmente no puedo evitar preguntar ¿por qué el príncipe tiene que ser de color azul?

sábado, 7 de agosto de 2010

RING RING

¿Esperando esa llamada? Odio cuando los hombres dicen “cualquier cosa te llamo” ¿a que se refieren? ¿Van a llamar o no? Por más que siempre he intentado tomar las cosas de manera deportiva, caigo en la maldita espera de la llamada, en especial, cuando dicen “fácil te llamo para hacer algo”. “Fácil”, detesto esa palabra, creo que si de verdad quieren salir o van a llamar debería de hacerlo no anunciarlo. Es igual de indignante como cuando alguien te quiere contar algo y te dice “mejor no” ¿entonces por qué me dijiste que quería contarme algo en primer lugar?

En esta espera de la llamada o mensaje de texto, procuramos mantener la línea libre para que el maldito no se tope con la llamada en espera y no nos sorprenda con la conocida “llame pero me mando a buzón de voz”. Te desesperas colgándole a todo el mundo y diciéndole a tus amigas “te dejo, te dejo porque FACIL llama”.

Incluso cuando el teléfono no suena ni porque pusiste la alarma estas mirando de manera obsesiva una y otra vez la pantalla como si existiera una conexión telepática con el sujeto para que se anime a marcar tu número telefónico. De pronto, cUando suena el teléfono el corazón te da saltos, las manos se te ponen frías y si el aparato está lejos de ti corres rauda, astuta y velozmente dando un gran salto de tigre para cogerlo y contestar, ves que es un número desconocido y la emoción de carcome; resulta que es número equivocado (suele suceder).

Fallas técnicas, quien no ha pensando en la posibilidad que justo ese día hay alguna avería telefónica y por eso es que las llamadas no entran ¿y si está llamando y no funciona mi teléfono? Le pides a alguien que te timbre y, naturalmente, el servicio es óptimo. Aceptas la realidad peo aún es temprano y en el caso hipotético de que me invite a salir probablemente llame en la tarde porque si llama en la mañana de repente crea que suena muy desesperado ¡patrañas!

Te metes a bañar, rápido porque esperas la gran llamada, y cuando regresas ves en tu buzón de entrada 2 nuevos mensajes de texto. Te emocionas y una vez que los abres dicen “APRENDA INGLES EN SÓLO 3 CORTAS SEMANAS LLAMAR AL NUMERO 46253-342”.
Llegaron las 9 de la noche y haz tirado la toalla pero ahí no acaba todo te metes al Messenger esperando encontrarlo y que te dé una explicación racional. Tratas en el chat del facebook esperando a que la ventanita se abra y sea él contando que le robaron el celular o que todas las tarjetas de recarga del mundo se acabaron. Lo cierto es que le salió otro plan y no está sumido en el mundo cibernético esperando encontrarte.

Aprendí, con los años que cuando un chico te quiere ver, hará lo imposible por verte. Uno de mis pretendientes, siempre con una mano sobre la otra, hacia lo imposible para conseguir dinero para ir a mi casa a verme hasta buscaba algo de sencillo entre los sillones de su casa ( un tanto patético, jamás debió contármelo). Es momento de dejar de esperar y golpear el celular contra las paredes ¿quieres salir? Entonces sal y no te quedes sentada esperando a que él decida llamar o FACIL se anime. Los chicos deben de aprender que una tiene una vida ocupada y llena de planes (al menos crear la ilusión de que es así).